¿Cuál es la postura perfecta?

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Existen muchos criterios que hacen que esto sea muy variable, solo voy a exponer mi punto de vista, totalmente subjetivo, ya que me abrió la puerta a la reflexión sobre este tema un comentario en una publicación que hice…

1) Criterio de escuela

No es lo mismo una postura Trikonasana de la escuela de Iyengar, que una de la escuela de Sivananda, o de la escuela de Ashtanga.

Si le pedimos a tres practicantes que hagan cada uno de ellos la postura Trikonasana de su escuela, los tres la harán tal vez perfecta, pero las tres serán diferentes, por lo tanto el primer criterio ya separa lo que sería una postura «perfecta» de otra postura «perfecta».

2)  Criterio del Profe de la escuela

Incluso dentro de una misma escuela, los criterios pueden ser diferentes.

Cada profe tiene su personal equipaje de práctica/experiencia/conocimiento/anatomía y en base a eso enseña o transmite en su peculiar formato.

Much@s estudiantes sentirán afinidad con un/a profe, mientras que otros estudiantes sentirán afinidad con otro/a profe.

Eso no hace que un/a profe sea mejor que otro/a profe

Eso justamente es lo valioso que tiene la diversidad…

Cada estudiante puede elegir…

Ahora, ¿Son todos/as los profes buenos?

Es difícil responder a esa pregunta…

3) Criterio de la Biomecánica

Se le suele llamar así al conjunto de «normas de funcionamiento» que tiene el cuerpo físico, y yo en lo personal creo que son un gran aporte de occidente al Yoga. A mí me dió una gran base de apoyo para mejorar y profundizar muchas posturas sin riesgo de lesiones…

Pero hay algo que se debe aclarar: No todos los cuerpos son iguales. Entonces, por más que «en general» se puedan aplicar muchas pautas de Biomecánica, en lo particular hay que estar atentos a cada peculiaridad. La genética que estructura al cuerpo puede hacer cosas muy diferentes…

4) Criterio Personal

Cada persona tiene su punto de vista de «hasta donde quiere llegar» en una postura de Yoga, o hasta qué tipo de posturas quisiera llegar, las razones o fundamentos pueden ser infinitos, de acuerdo con cada practicante, así que otra vez nos encontramos con mucha amplitud para definir a una postura «perfecta».

5) Sentido común

Es importante este punto porque la misma postura puede ser perfecta para una persona que tiene diez años de práctica, la cual incluso podria verse «perfecta» desde afuera (hay que ver qué también sea «perfecta por dentro», con la mente en silencio y la conexión con el Ser) y la misma postura en un practicante de un año tal vez sea «perfecta» para ese practicante en ese momento, porque es lo que más puede dar, y también observar la actitud interna de la postura, ya que a veces es ese sentido un practicante de un año puede hacer una postura más perfecta que uno de diez, ya que vale mucho más la actitud interna que la externa (aunque ésta es la que más seguidores da en Instagram)

Además muchas veces experimentamos en nuestra propia práctica que la postura es variable, como somos variables y fluctuantes nosotr@s. Ellas van fluyendo según nuestra edad, nuestro estado físico, si estamos con alguna enfermedad, si no dormimos bien, si estamos pasad@s de rosca, o medio averiad@s, o en armonía y paz.. La continuidad de la práctica en el tiempo logra exponer nuestra variabilidad y nos ayuda a asimilar la impermanencia, a la vez  esa práctica continua nos pone en contacto con la misma permanencia, propia del espíritu.

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Hagamos la práctica que nos dé verdadera felicidad, con respeto hacia todas las otras escuelas y prácticas…

Om Namah Shivaya 

«La postura que hacemos es perfecta porque es lo que podemos o necesitamos en ese presente, en ese instante..«

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 Germán Garro

(con un pequeño aporte de Gabriela Melo)

German Garro

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