*Las tradiciones más antiguas colocaban al elemento Tierra en el centro (y no entre el Fuego y el Metal, como es más habitual verla hoy en día): la Tierra al girar en torno a su eje se relaciona con los ciclos de la naturaleza y los ciclos de la vida. Así, el elemento Tierra también está asociado con los períodos de transición entre las estaciones, alrededor de los dos solsticios y los dos equinoccios (canículas). Dos o tres semanas en las que la energía de una estación se va desvaneciendo mientras comienza a sentirse la de la siguiente. Un momento de conclusión, de quietud y de preparación para el cambio. Es habitual encontrar en este periodo aspectos de todas las estaciones, clima especialmente caluroso y/o húmedo, y sobre todo variable, y esto se refleja también en el cuerpo.
*Es por ello que es especialmente importante mantenerse centrado durante estas transiciones, en contacto con la tierra y aprovechar para observar nuestro interior. También se dice que durante estos períodos de transición es posible tratar cualquier enfermedad o desequilibrio: así como es muy difícil tratar, por ejemplo, problemas del Riñón (Agua) durante el verano (podríamos debilitar el Corazón, y además no sería efectivo el tratamiento), en la canícula es posible encauzar la energía hacia cualquier órgano sin que los demás sufran las consecuencias.
*Entre las asociaciones del elemento Tierra están el sabor dulce, los colores amarillos y naranjas, el sentido del tacto, la boca y los labios, la saliva, el bazo y el estómago, la humedad, el canto, la simpatía, el intelecto y la empatía. Una atracción o repulsión especial hacia alguno de estos aspectos puede querer decir que hay un desequilibrio en uno de los órganos o meridianos Tierra.
*La Tierra es el centro de los elementos y el elemento cohesionador: es el cimiento de nuestra existencia física, es la cualidad que nos permite ver la materia como algo sólido, y no como mera vibración. La Tierra nos da seguridad, apoyo y estabilidad. Desde tiempos inmemoriales ha habido una fuerte vinculación entre la Tierra y la madre en prácticamente todas las culturas del mundo. Desde que nacemos, es nuestra madre quien nos da todo el sustento, apoyo y seguridad que necesitamos.
*La Tierra es fertilidad. En este tiempo, el final del verano, es cuando la naturaleza nos muestra su calidez, riqueza y abundancia. Es el tiempo de la recolección, de la cosecha del grano, de la selección y la elaboración de los alimentos que garantizarán la supervivencia a lo largo del invierno. La Tierra nos alimenta, nos nutre.
*El elemento Tierra posee el potencial para manifestar de forma física, en un producto o resultado tangible, toda la energía y la acción que nos dio el Fuego. Lo que otras personas digan de esos productos, el modo en que los utilicemos, serán aspectos de la comunicación asociada con el siguiente elemento, el Metal.
*El par Zàng-Fǔ (órganos internos) asociado con la Tierra son el Bazo y el Estómago, que tienen el poder de la transformación y transporte de los alimentos y los líquidos, y se encargan de la digestión, no sólo de los alimentos, sino también otros aspectos de la vida, como los pensamientos o los sentimientos. Cuando el Estómago, y principalmente el Bazo (según la Medicina China), no ejercen bien su función, el cuerpo no tiene energía, nos sentimos cansados, y el resto de órganos tampoco pueden funcionar correctamente.
*Se ha intentado traducir a emoción relacionada con el elemento Tierra de muchas maneras: preocupación, pesar, simpatía… Pero el ideograma 意, yì, la “emoción” del Bazo se traduce literalmente como pensamiento. Contiene los radicales del corazón y el cerebro, por lo que no es completamente una emoción ni un pensamiento, sino que une a los dos. El reino del Bazo (y de la Tierra) es el del pensamiento, de la reflexión. Ambos se sitúan en el Centro: entre la alegría del sur (Fuego) y el miedo del norte (Agua), entre la ira del este (Madera) y la tristeza del oeste (Metal). La Tierra templa estos movimientos emocionales a través del pensamiento. Ayuda a tomar la distancia necesaria, a medir, a sopesar los pros y los contras. Es racional. Por eso se dice que el exceso de preocupación y las contrariedades alteran la energía del Bazo y el Estómago.
*“Pensamiento reflexivo” podría ser una traducción aceptable del carácter 意, yì, pero no tiene en cuenta otra dimensión potencial de su significado, la del funcionamiento del intelecto en el mundo con una motivación compasiva y sentida (viendo las cualidades de nutrición, apoyo y seguridad de la Tierra). Como la capacidad de la Tierra es tanto para recibir como para dar, la emoción de la Tierra debe dirigirse tanto hacia adentro como hacia afuera. El elemento Tierra, cuando está equilibrado en la psique humana, recibe y da en igual medida, recibe las señales emocionales y los actos comunicativos de otras personas de modo que obtiene apoyo y nutrientes para sí. Este doble proceso puede entenderse como empatía. Cuando la Tierra está desequilibrada, tiende a veces a dar mucho y no poder recibir, o bien con una gran necesidad y una falta de medios para dar.
*La gente Tierra suele dedicarse demasiado a tareas intelectuales, olvidándose a menudo de la parte física. Por una parte, el sentido asociado a la Tierra es el del tacto, por lo que es muy importante para el equilibrio de la Tierra el contacto físico con otras personas (abrazos, caricias, masajes…). Por otra parte, el Bazo gobierna los músculos, por lo que es importante combinar la actividad intelectual con la actividad física. Así que, si te gusta mucho leer y estudiar… ¡no te olvides de hacer algo de ejercicio!.
*Sin embargo, lo más importante para mantener la Tierra equilibrada es la alimentación. Es un momento perfecto para plantearte un cambio a una dieta más sana. Podemos empezar, por ejemplo, recordando los principios del buen comer. La Tierra tiene afinidad por los alimentos más neutros: ni fríos, ni calientes; ni yin, ni yang; justo en el centro. El sabor que nutre a la Tierra es el dulce, pero, ¡ojo!, el dulce natural de las verduras y los cereales, no el extremo del azúcar o la miel. También los alimentos amarillos y anaranjados, como el maíz, la zanahoria, la calabaza… Como siempre, lo más adecuado es buscar las frutas y verduras de temporada. En esta época de transición del verano al otoño, nuestra dieta también debería ir cambiando poco a poco de más ligera a más nutritiva, que nos proporcione más combustible para trabajar y que nos caliente según van enfriando los días.
*Sobre todo, recuerda que “somos lo que comemos” y que la alimentación correcta es básica para el bienestar y el estado de energía. La dieta afecta a todos los aspectos de la vida: trabajo, productividad, personalidad, sueño (y sueños), cómo nos sentimos, la salud y la enfermedad.
- Finalmente, os dejo un pequeño resumen de asociaciones del Elemento Tierra:
Elemento | Tierra |
Estación | Verano tardío / transiciones estacionales (canicula) |
Fase Vital | Edad adulta – edad fértil |
Factor climático | Humedad |
Dirección | Centro |
Movimiento | Quietud |
Órgano / Víscera | Bazo / Estómago |
Sentido | Tacto |
Órgano sensorial | Boca |
Color | Amarillo-naranja |
Olor | Fragante, perfumado |
Sabor | Dulce |
Emoción | Intelecto / Pensamiento Reflexivo / Empatía (Yi) |
Sonido | Canto |
Durante estos periodos habrá que tonificar el sistema digestivo y para ello serán unos buenos aliados los alimentos que están en contacto con la tierra y de color naranja, como por ejemplo, la calabaza o la zanahoria. El cereal por excelencia de esta época y que favorece las digestiones es el mijo (también del color del elemento).
En este período de tiempo empezamos a dejar los alimentos crudos para volver a introducir poco a poco alimentos cocinados. Alimentos que nos resulten más fáciles de digerir y que nos ayuden a reconstituirnos (mijo, manzanas, uvas, judías, etc.) para que el cuerpo empiece a prepararse para el otoño y el invierno.
El sabor del elemento tierra es el dulce, pero hay que aclarar que nos referimos a un dulce suave y natural presente en los alimentos ricos en hidratos de carbono de absorción lenta, que nos garantizan unos niveles de glucosa en sangre regulares. Este tipo de dulce lo encontramos en las verduras dulces como la calabaza o las frutas como el melocotón y ayudan a no tener pensamientos repetitivos, a reducir la preocupación y a no dar “demasiadas vueltas” a las cosas. Estar demasiado preocupados nos quita energía y nos quedamos sin fuerza.
El otoño según la Medicina Tradicional China
MOMENTO PARA RENOVARNOS Y LIBERARNOS DE LO VIEJO
Tradicionalmente, el otoño es la temporada de la cosecha. Es el momento en que nuestros cuerpos tienen que recolectar la energía para los meses fríos de invierno. En la Medicina Tradicional China (MTC), el otoño es el elemento metal que corresponde a los pulmones y al intestino grueso. Los pulmones según la MTC están directamente relacionados con la piel y el sistema inmunológico, por lo que debemos cuidarlos especialmente si deseamos disfrutar de una piel radiante y un invierno a prueba de catarros y gripes. La sequedad es común en otoño, los labios secos son un signo de sequedad, como la piel seca, las arrugas, la sequedad de garganta, tos seca o estreñimiento.
El elemento metal se caracteriza por su carácter de transformación en los niveles físicos, emocionales y espirituales. La emoción del otoño según la medicina china es la pena, por lo que es probable que nos sintamos más sensibles en esta época del año y percibamos nuestras emociones de un modo más intenso. Con la llegada del otoño, los árboles pierden sus hojas. Este es el momento de liberarnos nosotros también de lo que nos sobra, de lo viejo, lo caduco, de los aspectos inservibles que nos rodean y abrir nuestra mente y nuestro espíritu a lo nuevo, a las oportunidades, a todo lo bueno que aún está por llegar.
Consejos para disfrutar de un otoño saludable:
- Consuma los alimentos propios de esta estación.
- Evite los alimentos fríos (ensaladas frías, gazpachos…) y comience a disfrutar de platos templados y con un mayor grado de cocción.
- Proteja sus pulmones con vegetales blancos (coliflor, cebolla, ajo, puerro ,nabos, patatas… ).
- Disfrute de las frutas de otoño como las naranjas, mandarinas, manzanas…
- Beba e hidrátese en abundancia, así evitará la sequedad propia de esta estación.
- Revise, y reordene sus armarios .Esta es la época ideal para deshacernos de lo viejo y dejar paso a lo nuevo.
- Abríguese y proteja sus pulmones.
- Duerma lo suficiente y procure alejar el estrés. Le ayudará disfrutar de un robusto sistema inmunitario.
La Medicina Tradicional China (MTC) cree que la gente debe adaptarse a la naturaleza. Según la base del principio del Yin y el Yang, la primavera y el verano pertenecen al Yang y el otoño y el invierno pertenecen al Yin. El otoño es la transición y conversión del Yang al Ying. En esta época, el Yang va disminuyendo, y el Yin va aumentando. Por eso, es importante que se nutra el Yin dentro del cuerpo para preservar la salud.
En otoño la clave es nutrir el Pulmón y el Yin
El Pulmón se relaciona con el otoño, así que en esta época es conveniente nutrir el Pulmón. La Sequedad también está relacionada con él, además de ser una parte del Yang que puede consumir Jin Ye (como los líquidos fisiológicos). El Pulmón está más “delicado”, no tiene tolerancia al frío ni al calor. El Pulmón se abre en la nariz, controla la piel, el vello y protege el exterior del cuerpo. El sistema respiratorio es un sistema abierto. Por eso, la nariz, el tracto respiratorio y el pulmón son fácilmente dañados por la Sequedad (Zao). En otoño, debido a los cambios drásticos de temperatura entre el día y la noche y al aire frío y seco, aparecen enfermedades respiratorias. Identificará una serie de síntomas: sed, boca seca, labios secos, nariz seca, dolor de garganta, tos seca, piel seca, heces secas, estreñimiento e inquietud.
¿Cómo podemos evitar estos problemas?
1. Algunas frutas pueden prevenir la Sequedad, por ejemplo: la pera, la sandía, el plátano, la banana y las uvas.
2. La dieta es una buena manera para nutrir el Pulmón. Además de los citados anteriormente, se pueden consumir cítricos, caña de azúcar, zanahorias y miel.
3. El lirio, una planta que se usa en la MTC, puede nutrir el pulmón, calmar la tos, añadir Yin, eliminar el calor y calmar los nervios. Se puede utilizar como una infusión para beber y también se puede mezclar con la comida.
En muchos de nosotros, los cambios de estación afectan a nuestras emociones y estados de ánimo: cómo nos sentimos físicamente. Pueden dar pie, incluso, a sentimientos de estancamiento o de falta de armonía en nuestro día a día, en el fluir de nuestras vidas. Hay quien, por ejemplo, siente un mayor apego o pena durante el otoño, estados asociados, en buena medida, con la “pérdida” del verano, de su luz, de su calor.
El otoño es una estación de transición para preparar cuerpo y mente para el invierno. Es, además, el momento de desprendernos de lo superfluo y de reorganizar(nos). ¿Has observado la naturaleza durante esta estación? Los árboles se desprenden de sus hojas; muchos animales, por su parte, se preparan (y organizan) para los meses de invierno, para la hibernación.
La medicina tradicional china (MTC) asocia el otoño con los pulmones y el intestino grueso. Durante los meses otoñales, estos dos órganos son los más vulnerables y, por ello, es esencial prestarles una mayor atención.
El Pulmón en medicina tradicional china
Es el órgano yin más externo y regula el qi (o energía vital) y la respiración, conectando el cuerpo con el mundo externo a través de la nariz. De ahí la vulnerabilidad de los pulmones frente a los factores climáticos.
Cuando el qi de Pulmón está equilibrado,
- experimentamos claridad de pensamiento y una imagen positiva de nosotros mismos;
- nos dejamos llevar por una paz interna y bienestar más allá de las circunstancias que nos rodean.
Cuando, por el contrario, hay un bloqueo y la energía de Pulmón no puede fluir libremente, esta se congestiona y estanca, desajustando todo el aparato respiratorio. En ese momento, afloran emociones como:
- la aflicción,
- la tristeza,
- el apego.
El Intestino grueso en medicina tradicional china
Es el órgano yang asociado con los pulmones, encargado de absorber lo puro y excretar lo impuro; de tomar lo nuevo y de desprenderse de lo viejo.
Cuando el qi de Intestino grueso está equilibrado y circula libremente,
- sentimos una marcada sensación de calma y relajación;
- somos capaces de desprendernos de todo aquello que ya no nos sirve;
- fluimos con la vida en lugar de resistirnos a ella.
Una circulación obstruida o ineficiente de qi en este órgano puede agudizar:
- la incapacidad para dejar ir, para no aferrarse;
- la rigidez y el nerviosismo;
- la tozudez;
- el estancamiento;
- la negatividad.
Recomendaciones para romper el estancamiento emocional
Ante todo, cabe recordar que es importante y saludable ser capaz de experimentar el amplio abanico de emociones, incluso aquellas que habitualmente catalogamos como negativas. Todas las emociones que podemos llegar a sentir cumplen una función. Todas y cada una de ellas nos ayudan a relacionarnos y a adaptarnos al mundo que nos rodea. Por ello, en lugar de evitarlas o suprimirlas, es aconsejable aprender a manejarlas, para usarlas en nuestro propio beneficio y evitar, así, que nos controlen.
Si durante estos meses de otoño observas una sensación pronunciada de estancamiento o sientes una tristeza o desazón que se prolongan día tras día, préstate atención y utiliza los recursos a tu alcance para devolverle a tu cuerpo y a tu mente el equilibrio y bienestar que se merecen.
Tratamientos con medicina tradicional china
A través de sus distintas técnicas y terapias, la MTC puede brindarte un gran abanico de recomendaciones para, así, ayudarte a restaurar y reforzar la circulación fluida del qi de Pulmón y de Intestino grueso. Los tratamientos no solo se adaptarán a lo que puedas estar sintiendo o atravesando en ese mismo momento, sino a la energía de la estación.
Acupresión en IG4
Refuerza tus pulmones e intestino grueso en otoño con acupresión Shen Dao Acupuntura Barcelona
El punto de acupuntura Hegu, o (“Unión de los valles”) es un punto muy versátil que en MTC se utiliza, entre otros, para reforzar el sistema inmunitario, aliviar el dolor, mitigar alergias y malestares comunes de gripes y resfriados, regular la digestión y calmar la mente.
Para localizarlo, cierra la mano en forma de puño y coloca el dedo pulgar sobre el dedo índice. En el punto más alto del montículo entre ambos dedos se sitúa IG4.
Realizar acupresión sobre ese punto de acupuntura ayudará a armonizar el flujo de qi en los canales de Pulmón y de Intestino grueso. Para ello, presiona sobre el punto IG4 con los dedos pulgar o medio. Mientras presionas, toma 10 ciclos completos de respiración, llenando completamente el diafragma al inspirar y expulsando todo el aire al exhalar. Repite este ejercicio 9 veces en cada mano para obtener el máximo beneficio.
Qi gong y la «práctica de los seis sonidos curativos”
El qi gong (o chi kung) es una actividad que combina ejercicios físicos, meditación y respiración consciente para, así, disolver cualquier desequilibro emocional y en nuestro organismo, restaurar nuestro bienestar y potenciar nuestra vitalidad y paz interior.
Una de las prácticas contenidas en el qi gong es la “práctica de los seis sonidos curativos”. Esta es una práctica de agradecimiento hacia los órganos internos y hacia el linaje familiar. Nos ayuda, además, a generar armonía interna y a mejorar la relación que tenemos con nosotros mismos y con otras personas.
A través de la postura, la respiración y la intención, esta práctica permite liberar emociones negativas estancadas en los órganos y reconectar, así, con el estado natural de armonía de cada órgano.
Si la práctica de los seis sonidos se realiza antes de acostarse por la noche, esta nos ayuda a desacelerar el cuerpo, favorece un sueño placentero y de calidad, y refresca aquellos órganos que tienen exceso de calor en nuestro cuerpo.
El sonido asociado con el meridiano de Pulmón es: «SSSSSSSSSSSS» (colocando la lengua detrás de los dientes).
Práctica de chi kung de los seis sonidos curativos Shen Dao Acupuntura Barcelona
Pasos a realizar:
- Siéntate cómodamente.
- Toma tres respiraciones profundas.
- Considera una motivación pura para hacer esta práctica (personal y general).
- Inspira y sonríe a los pulmones, llevándoles energía positiva, gratitud y alegría.
- Al exhalar, haz el sonido “SSSSSSSSSSS”.
- Regresa a la posición de relajación, observando los pulmones.
- Repítelo 1 ó 3 veces al día, haciendo el sonido 9 veces.
Para reducir o neutralizar una energía emocional, emite el sonido alta y externamente. Para fortalecer una energía, realiza el sonido de manera sutil.
Aprovecha todos los recursos a tu alcance para armonizar tu organismo.
y disfrutar al máximo de un otoño hermoso.
Ntp. Roberto Lino Edreira
Experto en Medicina Tradicional China y Medicinas Naturopáticas.
Fundador del Sector de Medicina Tradicional, Complementaria Integrativa. Proyecto de Ley de MTCI, Senadora Nacional Silvina Larraburu, Comision de Salud.
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