En cuarto grado fui al internado de Río Mayo y antes, en los internados, te enseñaban a bordar, a tejer, a costurar. Bueno ahí aprendí a bordar y a tejer con palillos y a crochet. Después viví en el campo con mi abuela y ella hilaba en huso y con ella aprendí a hilar.
Mi abuela hacía medias de lana y con ella aprendí a tejer con 5 palillos, y con 2 igual; siempre en lana cruda.
Después participé en cursos de hilado y telar acá en Senguer, en Río Mayo, Rawson y Comodoro Rivadavia.
Primero hilaba con rueca; con ese hilo hacía telar simple, liso sin dibujo. Luego aprendí el peinecillo y el laboreo. Y cuando empecé a dibujar, el dibujo iba saliendo solo.
Hice bastantes trabajos en telar, sobre todo fajas y peleras. Lo que tiene para mí el telar es que tenés que contar con un lugar fijo donde poder trabajar, no se puede armar y desarmar o mover todo el tiempo. Entonces empecé a tejer más con palillos, porque si viajo me lo puedo llevar y me rinde más el tejido. Hago muchas camperas y chalecos.
La lana, ahora, la compro hilada porque el proceso del hilado artesanal es muy largo y laborioso.
Lo que tejo actualmente lo hago bastante rústico con guardas Pampa que es distinta a la guarda Mapuche. También, si me lo piden, les dibujo el nombre o cualquier otro diseño.
Voy registrando de cada pedido de camperas todos los detalles, para poder repetirla si hiciera falta; y ya llevo más de 200 entregadas.
Soledad Reinahuel.
Para ver otros trabajos y hacer consultas o pedidos podés visitar el perfil de Instagram: https://www.instagram.com/tejidossoledad_/?igshid=OTJhZDVkZWE%3D o comunicarte al: +54 9 2945 686062.
Cinto y faja hecho en telar. 
Tejido en telar.
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